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03 octubre 2019
Alumnos de Europa aprenden Swift y liberan su potencial
Durante este mes de octubre, que se celebra la Semana de la Programación de la UE en los salones de clase de toda Europa, los alumnos de todas las edades demuestran que la programación abre puertas a oportunidades inimaginables. En el Layton Primary School de Blackpool, Inglaterra, los principios de programación están ayudando a los niños de 5 y 6 años a atrapar a un travieso dinosaurio. Y en Italia, en el Instituto De Amicis de Milán, la programación fue la llave que le abrió las puertas a Belinda Tagariello, de 28 años de edad, para desarrollar la carrera profesional que le cambió la vida.
Estas escuelas forman parte de las instituciones europeas que cada vez usan más el potencial y la versatilidad del iPad, la Mac y los planes de estudio de Programación para todos y Desarrollo de apps con Swift de Apple, para enseñarle programación a una nueva generación de alumnos. Ambas escuelas mencionan que los programas han fomentado un aprendizaje más activo e innovador con excelentes resultados.
“Si hacen un aporte, obtendrán un resultado: son más ingeniosos a la hora de enfrentar un problema”.
Alice Nutt y Clare Scott son profesoras. Hace apenas dos años aprendieron a programar, y ahora usan Swift Playgrounds para incorporar los principios de programación en todas las materias que imparten a sus alumnos en el Layton Primary School de Blackpool, Inglaterra. La escuela, ubicada en una de las zonas más desaventajadas del país, ha experimentado un cambio extraordinario en sus alumnos desde que comenzó el programa.
“Antes, los niños sólo se sentaban y esperaban a que pasara algo”, explica Scott, de 45 años, que lleva más de 20 años dando clases. “Pero los niños con mentalidad de programadores saben que si intentan hacer algo, algo sucederá. Si hacen un aporte, obtendrán un resultado: son más ingeniosos a la hora de enfrentar un problema”.
La mentalidad de la programación se ha extendido a todas las áreas de la escuela y los alumnos aplican los principios en todas las materias, la mayoría de las veces mediante Swift Playgrounds.
“Nos dimos cuenta de que ya usábamos las herramientas de programación en nuestro plan de estudios”, afirma Nutt, de 28 años. “Cuando escribimos, regresamos, lo editamos y lo mejoramos: estamos depurando. Realizamos secuencias de historias, de eventos y de cosas que hacemos en nuestra vida diaria. Por lo tanto, sólo se trata de hacer que todos en la escuela descubran que la programación ya existe a nuestro alrededor”.
En el salón de Scott, sus alumnos de 5 y 6 años practican habilidades de programación en tareas comunes y extraordinarias. Ella les planteó un problema: ¿cómo podemos capturar al dinosaurio que se escapó del zoológico? Los alumnos decidieron que harían sándwiches de mermelada para dejarlos fuera del salón y así atraer a la criatura.
Scott trajo pan, mantequilla y mermelada y pidió a los alumnos que le dieran instrucciones paso a paso sobre cómo hacer el sándwich. El ejercicio les permitió conocer los comandos individuales necesarios para ejecutar una secuencia de codificación.
“Dejamos el sándwich de mermelada fuera del salón durante toda la noche”, comenta Scott. “Y obviamente el dinosaurio regresó y se lo comió, al día siguiente sólo había migajas”.
En Italia, Belinda Tagariello pasó gran parte de sus 20 años yendo de un trabajo a otro con poca satisfacción. En 2017, se inscribió a un curso financiado por el gobierno para jóvenes adultos desempleados y con pocos recursos en el Instituto De Amicis de Milán, en el cual enseñaban Swift, el potente y sencillo lenguaje de programación de Apple. Como principiante, Tagariello aprendió los aspectos básicos de la programación en Swift Playgrounds para iPad y enseguida pasó al Desarrollo de apps con Swift para Mac creando sus propias aplicaciones.
Hoy en día, Tagariello enseña el mismo curso, ya tiene una app en el App Store y está trabajando en el desarrollo de la segunda.
“Cuando empecé a desarrollar la app, me sentí libre porque podía hacerlo yo sola”, cuenta Tagariello. “Cuando descubrí esto, encontré mi verdadero camino”.
41 alumnos han completado el curso y, en conjunto, han creado 14 apps en apenas dos años. 16 de los graduados ya trabajan en la industria de la tecnología y 5 se han inscrito en la universidad.
Este mes de octubre, Tagariello dará la bienvenida a la tercera generación de 29 alumnos, la mayoría de los cuales no tienen experiencia en programación. La profesora les dice que no deben preocuparse por eso, y lo dice, por supuesto, por experiencia.
“[Al principio] Yo no sabía nada de programación, para que me tomen como ejemplo”, explica Tagariello, que primero enseña a sus alumnos a programar mediante la divertida y atractiva app Swift Playgrounds de Apple para iPad, y poco a poco avanza hacia el Desarrollo de apps con Swift para Mac. “Si se aplican a este curso llegarán muy lejos, más lejos que yo, e incluso podrían encontrar su verdadero camino”.
El plan de estudios de Programación para todos de Apple permite que los alumnos, desde el kínder hasta la universidad y más allá, aprendan a programar para resolver problemas, además de prepararlos para la vida laboral. Gracias a las guías y lecciones para profesores, los alumnos aprenden los aspectos básicos en el iPad con Swift Playgrounds y el Desarrollo de apps con Swift, lo que ayuda a los aspirantes a desarrolladores a crear sus primeras apps en iOS. Hoy en día, más de 5,000 escuelas, universidades públicas y escuelas técnicas de todo el mundo usan el plan de estudios de Programación para todos. Para obtener más información, visita apple.com/co/everyone-can-code.
Imágenes del Layton Primary School y del Instituto De Amicis